El "No"

La Comunicación No Violenta nos proporciona una nueva forma de escuchar y relacionarnos con el "No".
Cuando alguien me dice No a algo es porque está diciendo Sí a otra cosa. Hace dos semanas compartíamos en estas propuestas quincenales que todo lo que hacemos cada día lo hacemos buscando satisfacer nuestras necesidades. Si un amigo me propone salir al cine y luego a tomar algo y yo le contesto que no, ¿A qué puedo estar diciendo sí? ¿Quizá estoy agotado y necesito descansar? ¿He quedado previamente con alguien y para mi es importante cuidar mis compromisos?
Si tengo esto presente, cuando alguien me dice No, puedo comprender que está diciendo Sí a una necesidad importante para él en este momento.
Cuando escuches un No a una petición tuya te proponemos:
-Pararte y darte cuenta de que puedes sentirte frustrado.
-Recordar que detrás de ese No hay un Sí de la otra persona a una necesidad muy viva en ella en ese momento.
-Intentar imaginar a qué dice sí la otra persona, de qué necesidad está cuidando.
-Y si es posible, entablar un diálogo con el otro: "cuando te he preguntado si podías encargarte esta tarde de este cliente y me has dicho que No, imagino que...Si te digo esto es porque para mí es importante comprender lo que te ocurre y no tomármelo como algo personal."

-Luego conéctate con las necesidades presentes en ti: consideración, aprecio, valoración, apoyo,...y date cuenta de lo humano y universal de esas necesidades.


No es un "no" a ti...

   
Un "no" a una petición es sólo un "no"  a una acción concreta                    
En nuestra anterior propuesta quincenal, compartimos la posibilidad de escuchar el Sí detrás del No cuando recibimos una respuesta negativa a una petición.
Hablamos de que la otra persona, al decirnos "no", dice sí a cuidar de una necesidad importante para él en ese momento. Ahora bien, ¿Qué pasa con nuestra necesidad? ¿Queda insatisfecha con ese "no"?
Es precisamente en esos momentos, cuando recibimos un "no" a nuestra petición, cuando resulta vital ser consciente de la diferencia entre acción y necesidad. 
Llego a casa cansado, con ganas de paz y quiero cenar con mis hijos adolescentes. Y al pedírselo, me contestan que se bajan al bar con unos amigos para ver el fútbol. ¡He recibido un "no" a mi acción preferida en ese momento para satisfacer mis necesidades de tranquilidad y conexión!.
Si tomo conciencia de esta diferencia, de que me han dicho "no" a una manera concreta pero no a dicho "no" a mi necesidad, es más probable que encuentre apertura, que no me quede enganchado a esa estrategia y que pueda encontrar otras maneras de satisfacer esas necesidades de tranquilidad y conexión.
Las necesidades de mis hijos y las mías no están en conflicto; sus estrategias y las mías, al menos esta noche, sí. Y desde la apertura que me da esta toma de conciencia, puedo elegir otras formas diferentes de cuidar de lo que me importa, como leer esa novela en la que no acabo de avanzar porque me quedo dormido, hacer una llamada de teléfono a ese amigo con el que quiero hablar desde hace tiempo, escuchar una música que me relaja o emociona,...
Si somos capaces de enfocar así las situaciones de la vida, al escuchar un "no" ya no pensamos que nuestra necesidad no va a ser satisfecha. Solo significa que esa estrategia concreta no va a ser posible. Al menos esta noche.
El darme cuenta de esto puede ser realmente liberador, tanto para uno mismo, como para los demás. Desde esa conciencia no dependo de una sola estrategia para cuidar de mi necesidad y le pido al otro con más ligereza, con más libertad y menos exigencia. Y aún si me dice "no", sé que puedo encontrar muchas otras maneras. Y eso me hace a la vez más dueño de mi vida y más atractivo para los demás.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.